Una crónica visual en progreso

Por Hortensia Montero (Historiadora y Museologa,
Museo de Bellas Artes de Cuba)

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La actuación artística de Ricardo Casado en las artes visuales, después de graduarse de la Escuela Vocacional de La Habana y sus estudios posteriores de pedagogía vocal en el Instituto Superior de Arte (ISA) en La Habana, determina la pluralidad de su carrera, marcada por la diversidad y la resonancia de sus habilidades creativas. Su virtuosismo es notablemente apreciado tanto en las artes visuales como en la música. Además de la expresividad que logra en su repertorio pictórico, el autor pertenece al reconocido grupo Quarta Prodigia, conocido por el excepcional nivel de interpretación vocal y visual en el escenario.

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Amante de la buena música, Ricardo disfruta pintar con maestría técnica, mientras escucha sus canciones favoritas. Actualmente, el artista está involucrado en la creación de un mural de óleo sobre lienzo, compuesto por un tríptico, de 72 por 48 pulgadas cada pieza, utilizando diferentes técnicas pictóricas. Este proyecto es un viaje a través de la historia de una institución, expresado a través de símbolos. Representa el crecimiento de una empresa de contabilidad, desde sus inicios hasta la actualidad.

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Utiliza referencias visuales, como hilo conductor de las conexiones históricas más relevantes en estos casi sesenta años desde la fundación de la firma, y ​​también de su conocimiento sobre el desarrollo de esta entidad, Ricardo transmite esta síntesis histórica a la pintura. Al mismo tiempo, expresa en lienzo las principales preocupaciones filosóficas, emocionales y prácticas de esta institución, representadas a través de elementos simbólicos.

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La composición gráfica se basa en una expresión abstracta, a través de su característico estilo personal. Su sensibilidad artística combina el expresionismo abstracto y el arte figurativo para lograr visibilidad a través de alegorías. Para recrear los elementos unificadores de esta historia, usa dos estilos representativos de su universo expresivo. Asume su lenguaje abstracto particular como la base de la composición y utiliza el realismo para referirse a las entidades simbólicas que caracterizan la historia que quiere contar.

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Desde un punto de vista pictórico, su discurso estético en esta composición se logra utilizando una base de colores donde la paleta se ilumina, teñida por los azules, verdes, violetas, amarillos y negros, para alcanzar un conjunto seductor de matices, transmitiendo información detallada. de los hechos más relevantes de esta historia. Asume un componente narrativo donde las motivaciones emocionales y filosóficas del tema tienen prioridad. Para hacer esto, utiliza una exploración conceptual, que le permite asumir con destreza el desarrollo de esta escala estética. Las entidades pictóricas se centran en la producción de elementos simbólicos, que cuentan una secuencia de eventos que han tenido lugar a lo largo del tiempo para referirse a los hitos fundamentales de una institución tan importante.

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Esta compañía ha crecido considerablemente al expandir su rol técnico y su irradiación social. El objetivo es reflejar los hitos de su existencia, a través de un mural de pura tradición figurativa, basado en el componente narrativo pictórico, desde los orígenes de la contabilidad hasta la creación, el crecimiento y la etapa actual de este importante consorcio.

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Desde el punto de vista técnico, Ricardo obtiene el volumen de trabajo usando aceite, y obtiene efectos visuales al raspar la pintura, ayudado por la espátula y haciendo uso del rodillo, logrando las texturas que cubren la base pictórica. En esa superficie, traza la trayectoria histórica de la institución dada su impronta concreta, gracias a sus artilugios, su conocimiento sobre el tema y su dominio de las técnicas pictóricas.

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La historia narrada consta de escenas sucesivas, que denotan la adición de elementos para garantizar el componente histórico y anecdótico, que es esencial. Los colores están directamente conectados para obtener una riqueza formal, marcada por la calidad del dibujo y la luminosidad del cromatismo. Los hechos históricos son como hitos que evocan las diferentes etapas de esta ruta.

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Luca Bartolomeo de Pacioli (1445-1510), una figura pionera en la historia de la contabilidad se destaca, cuando en el siglo XVI, creó en Roma los primeros registros contables y estableció el concepto de doble entrada, una premisa fundamental de esta disciplina. Sobre esta base histórica, la compañía fue fundada en 1959 con un contador, Gary Gerson, con el objetivo de proporcionar servicios de contabilidad a unos pocos clientes. Comenzó en Miami Beach prestando servicios a pequeñas empresas ubicadas en Hialeah y se ha expandido considerablemente a una empresa que ofrece un amplio espectro de servicios de contabilidad. La antigua ubicación durante 58 años se mudó recientemente a Wynwood, en el corazón del Distrito de Arte de Miami debido al crecimiento constante del negocio.

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Los eventos más relevantes en la historia de este equipo están representados en resumen, incluida la representación de oficinas entre las que figura el fundador, que aún conserva el mismo escritorio de sus inicios.