El luzzismo fue creado por el artista cubano-estadounidense Ricardo Casado en los Estados Unidos de América.
En 2013, Casado comenzó a incorporar luz artificial en su obra pictórica, lo que le da a las pinturas al óleo un aspecto y una sensación de vitral.
 
Utilizando esta técnica novedosa, transpiran dos piezas diferentes. Cuando se ilumina la pintura, los colores y las formas se despiertan más allá del reconocimiento. Luego, cuando se observa con gafas 3D, la pintura se manifiesta en una experiencia multidimensional.
 
La primera exposición pública de Casado como luzzista se realizó en 2013 en la Galería de Arte Sarracino en la ciudad de Coral Gables, Miami, Florida.
 
Está renovando el lenguaje artístico al despertar la imaginación en nuevas dimensiones. El luzzismo es una experiencia espiritual: el trabajo estimula su mundo interior y, al mismo tiempo, prueba su percepción de la realidad.
 
El arte, como las pinturas tradicionales, se puede observar sin contraluz; sin embargo, el uso de la luz lo transforma de una pieza monocromática a un espectro completo de colores, ganando autonomía como entidad propia.
 
El luzzismo augura convertirse en una tendencia histórica de vanguardia en el mundo del arte –al igual que lo fueron el expresionismo, el cubismo y otros movimientos culturales– pero con un toque más contemporáneo debido al uso de la tecnología actual.

El luzzismo va más allá de una simple observación: es una experiencia donde el espectador entra por un portal a una nueva dimensión.
 
Sus valores estéticos e inspiradores están transformando lo inmóvil y estático en algo vívido y tangible, forjando una conexión única entre el Hombre y el Arte.